Se trata de una idea traida del loco laboratorio de diseño de ASUS (¡léalo eisus, por favor, por lo que más quiera!), en el que un celular es introducido dentro de una tablet, que a su vez puede conectarse a un teclado para parecer un netbook. Sí, se trata de un tres en uno.
Impulsado por un procesador Qualcomm Snapdragon S4 8260A de doble núcleo a 1.5 GHz, respaldado por 1 GB de memoria RAM LPDDR2, el fabricante taiwanés presenta su PadFone abriendo un mercado que hasta el momento no se había considerado pero que de seguro se le había ocurrido a más de un usuario. Este dispositivo versatil cuenta con una cámara trasera de 8 megapixeles que se usa indistintamente para el teléfono o para el tablet/netbook; la frontal del teléfono es VGA y la del tablet es de 1.3 MPx. La pantalla del teléfono es una super AMOLED de 4.3 pulgadas, Gorilla Glass con película HCLR, mientras que el tablet posee una de iguales características pero de 10.1" y resolución WXGA 1280x800.
Ahora bien, usted se pregunta que pasa si entra una llamada telefónica y el teléfono está metido dentro del tablet/netbook (si es de su suegra no hay problema y sería una excusa perfecta). El asunto se resuelve fácilmente con un dispositivo cuyo nombre le debe encantar si creció con los videojuegos de los 90s: Mortal Weapon. No es algo con lo que pueda amenazar a su jefe, excepto si va a publicar sus sucios secretos corprativos, sino un lápiz que no solo le permite interactuar con la pantalla del tablet/netbook, sino también usarlo como manos libres inalámbrico con el que contestará sus llamadas.
¿Comparía usted uno de estos? Antes de contestar en la sección de comentarios, le invito a ver este video: